Podemos-Ahal Dugu ha presentado en el Parlamento de Navarra una moción en el Pleno para debatir y votar la “Tasa Rosa”.
La llamada “Tasa Rosa” o “Pink Tax” es una suerte de gravamen oculto en determinados productos que, por su definición y características, suelen diferenciarse de una forma fundamentalmente estética en función de que vayan dirigidos a un público masculino o femenino.
Se llama “Tasa Rosa” a ese incremento inexplicable que experimentan ciertos productos y servicios sólo por el hecho de estar dirigidos a un público femenino. El incremento, además, no viene dado por una mejora de las prestaciones de un producto en concreto, un mayor coste de producción, etc., sino que se advierte que la diferencia entre unos y otros suele ser, bien el color (tradicionalmente rosa/azul), bien la denominación del mismo.
La diputada María Teresa Sáez Barrao, denuncia que «aplicando esta tasa a los productos que compran las consumidoras, como el caso de compresas y otros destinados a la higiene y al cuidado corporal, se están vulnerando los derechos fundamentales de las mujeres en cuanto a igualdad y dignidad».
También en Estados Unidos y Francia
La iniciativa recuerda que ya en el año 1995, se realizó en el estado de California (EUA) un estudio sobre lo que se vino a llamar la “Tasa Rosa”. Dicho estudio determinó que las mujeres pagaban un promedio de 1.300 dólares más al año por los mismos productos y servicios que también compraban los hombres. Las mayores diferencias se daban en productos de higiene y cuidado corporal y servicios estéticos.
De forma más cercana en el espacio y en el tiempo, en Francia, el colectivo feminista “Georgette Sand” denunció en el año 2014 la existencia de esta “Tasa Rosa” con un amplio estudio sobre los precios de los productos en grandes superficies y también pequeños comercios. Esta protesta llevó a que el Ministerio de economía galo encargara la redacción de un estudio oficial sobre la cuestión, cuyos resultados y conclusiones están pendientes.
¿Que pide la iniciativa?
En la linea de la respuesta Francesa, la propuesta pide llevar a cabo una investigación sobre la “Tasa rosa” con el fin de legislar, dentro de las competencias autonómicas, para respetar la igualdad de los consumidores a la hora de acceder a productos y servicios, ya que muchos de los afectados por la “Tasa rosa” son de primera necesidad.
Además, propone incentivar a que los establecimientos vendan productos en los que no se aplique esta tasa, así como visibilizar «con pegatinas» aquellos que no la apliquen.
Ejemplos de TASA ROSA
Teresa Sáez pone ejemplos concretos de los precios de productos y servicios: comprar maquinillas de afeitar desechables cuesta a los hombres 0,49 euros y 0,70 a las mujeres;
lavar en la tintorería una camisa cuesta 6,50 euros a los hombres y 7,50 a las mujeres;
lavar, cortar y peinar en la peluquería, 15 euros a los hombres y 36 a las mujeres;
comprar un spray de 200 ml. cuesta 2,99 euros a los hombres y 3,06 a las mujeres;
adquirir un perfume de 100 ml. cuesta 58,6 euros a los hombres y 101,9 euros a las mujeres;
unos pantalones vaqueros cuestan a un hombre 24,99 euros y 39,99 euros a una mujer.