El próximo domingo se celebra en Portland la final del Mundial de pista cubierta de atletismo, donde la gran apuesta española es Ruth Beitia. La cántabra se enfrentará a Vasti Cunningham, de tan sólo 18 años, tras el veto provisional de la Federación Internacional a las atletas rusas tras los escándalos de dopaje y corrupción. Beitia asegura que la competición es, aún así, complicada, y que su 1,98 del campeonato español la avala, sigue siendo una prueba dura, larga y donde puede ocurrir de todo. Cunningham, por su parte, viene de saltar 1,99 metros, acercándola directamente a Beitia y con quien se medirá en la final del domingo.
Además de las atletas americana y la española estarán en la competición la polaca Kamila Licwinko (1,97), la lituana Airine Palsyte (1,97) y la italiana Alessia Trost (1,95).