- Sólo el 10% de los hombres cogen al menos un día de permiso parental; el 97% de las mujeres cogen el permiso parental disponible tanto para madres como para padres.
El Parlamento Europeo está debatiendo y evaluando la aplicación de la revisión de la directiva sobre el permiso parental, impulsado por la eurodiputada socialista María Arena. La anterior normativa, de 2010, no tiene aplicación común en los Estados miembros, y se busca así frenar la discriminación a consecuencia de bajas paternales y maternales diferentes.
En Europa los trabajadores tienen derecho a una baja parental cuando nace o se adopta un hijo o hija. No obstante, no existe igualdad entre los padres en Europa, ya que las condiciones de acceso a esta baja dependen de cada país.
Con el informe de María Arena, votado en Estrasburgo en mayo, la eurodiputada pide a Europa que dé prioridad a este asunto.
Entre los puntos destacados de la propuesta, están:
- Promoción de la igualdad de género en el reparto de las responsabilidades familiares con el aumento de la tasa de participación de los padres en el permiso parental (sólo el 10% de los hombres cogen al menos un día de permiso parental; el 97% de las mujeres cogen el permiso parental disponible tanto para madres como para padres).
- Aumento de la participación de las mujeres en el mercado de trabajo (objetivo de la estrategia Europa 2020 es del 75%, actualmente la participación está en el 63,5%), y promover así el equilibrio entre la vida laboral y personal.
- Ampliación de la duración mínima del permiso parental de 4 a 6 meses como mínimo.
- Aumento de la edad de los niños a la que se tiene derecho todavía a pedir el permiso parental.
- Garantizar los derechos individuales y aumentar por encima del mes vigente actualmente, la parte del permiso parental no transferible.
- Garantizar que el permiso parental sea debidamente pagado.
- Exigencia a la Comisión para que vuelva a presentar una propuesta ambiciosa de permiso de maternidad, y una directiva Europea que garantice en un mínimo de 2 semanas de permiso de paternidad.
La baja paternal sigue sin verse como un beneficio
Según los datos, sólo el 10% de los padres se toma la baja, lo que supone una diferencia muy considerable respecto a las madres. Arena defiende que la normativa vigente, que es la que funciona actualmente, no reconoce la discriminación en las bajas entre ellos y ellas, y no se implementa de la misma manera en todos los países miembros.
«El problema del cobro en esta baja es una de las claves para los hombres. ¿Por qué? Porque las mujeres europeas siguen atrapadas en su papel tradicional de responsables de los cuidados mientras que ellos continúan el papel tradicional de asumir la responsabilidad económica», sostiene Arena.
Los beneficios de una baja parental igualitaria es que, de pagarse de manera equitativa, permitiría una conciliación equilibrada entre trabajo y familia entre hombres y mujeres, y se acabaría con los impedimentos que ellas tienen para reincorporarse y conciliar.
Arena reconoce que entre las reticencias de algunos países a incentivar una baja parental igualitaria se encuentran el conservadurismo y que ciertos Estados no ven el pago de la baja como una inversión sino como un coste.
Vídeo-entrevista a María Arena