Según ha informado EL PERIÓDICO de Aragón la investigación interna ya ha finalizado y será remitida a la jueza del caso.
EL PERIÓDICO, ha indicado que «los responsables de la Brigada de Expedientes no han observado mala praxis en la actuación de los dos agentes» que atendieron a Marian G. S. y su hija.
El agresor , Juan Antonio Ruiz Díaz acribilló a balazos el coche en el que iban ambas mujeres y dejó hería de gravedad a Marian G. S que permanece aun en la UCI evolucionando favorablemente.
La hija denunció con posterioridad que habían acudido a pedir una orden de alejamiento después de que su madre recibiera amenazas telefónicas de su exmarido, pero no fueron, supuestamente, escuchadas.
El informe policial que valora la actuación de los dos agentes que asistieron a la madre e hija no coincide en ningún punto con el relato de las víctimas y recoge como buena la versión de los implicados que siempre dijeron haber animado a la denuncia y niegan haber sido avisados de que el ex-marido tuviera armas.
Los policías implicados lo niegan todo
El otro aspecto que han negado los agentes esta relacionado con la denuncia realizada por la hija de la víctima sobre una grabación en la que su madre era amenazada de muerte si no le hacía una transferencia de 40.000 euros y que segun declaro los policías se negaron a escuchar.
Los policías también negaron que la joven hubiesen intentado que escuchasen dicha grabación, Según el medio aragonés, «este tipo de prueba que hubiera llevado al Cuerpo Nacional de Policía a actuar de oficio, aunque la víctima no hubiera querido denunciar».
Sin embargo, según se deduce de la investigación los miembros de la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano realizaron el cuestionario de valoración y resultado de este protocolo dio negativo.
El informe policial está ahora en manos del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Zaragoza a quien corresponde dilucidar si los hechos se ajustan a lo relato en el informe policial o por las víctimas.