- Arcópoli exige a la Comunidad de Madrid la revisión del concierto educativo del Colegio Juan Pablo II de Alcorcón.
- El director del Colegio envió una carta a su alumnado criticando duramente la ley LGTB de la Comunidad de Madrid a la que compara con el “fanatismo terrorista” y les envió la homilía de los obispos contra la ley a la que considera “barbaridad” y califica como “este nuevo mal”.
La asociación Arcópoli ha exigido a la Comunidad de Madrid que revise el concierto educativo que tiene con el Colegio Juan Pablo II de la ciudad de Alcorcón debido a las informaciones que han recibido a través del alumnado. Según la documentación facilitada a Tribuna Feminista, el director del colegio, Carlos Martínez, envió una carta firmada a todos los estudiantes para incitarles a no cumplir la ley aprobada por unanimidad en la Asamblea de Madrid y poder evitar “la ideología de género” afirmando que la ley “conculca los derechos fundamentales”.
En la carta se llega a afirmar que «legislaciones tan absurdas como la reciente Ley de Ideología de Género» tiene «parecido con el fanatismo terrorista» y resulta «inquietante».
Arcópoli afirma que ha intentado varias veces reunirse con la Secretaría del Centro Educativo para poder ver cómo ir implantando la ley así como debatir sobre esta opinión sesgada, pero nadie del Colegio ha respondido a su invitación. También se han puesto en contacto con la Comunidad de Madrid para expresar su preocupación ante la situación del alumnado LGTB en este centro sufragado con dinero público, ya que, supuestamente, según alumnos que se han puesto en contacto con Arcópoli, el único mensaje que se transmite acerca del colectivo LGTB es que “la homosexualidad es una enfermedad” y que “es posible curar a los homosexuales”.
También se llega a afirmar que «el islam o la ideología de género no son más que otros programas humanos, como enseña Juan Pablo II, y son maquinaciones condenadas a la disolución y el fracaso».
«Desde Arcópoli creemos que la libertad de enseñanza no ampara la vulneración de la dignidad ni el ataque a la igualdad de derechos o al libre desarrollo de la personalidad. La libertad religiosa no permite que cualquier religión pueda adoctrinar en sus colegios a sus estudiantes en contra de la Constitución, de la Organización Mundial de la Salud y de las leyes emanadas de los Parlamentos», han hecho público en un comunicado a los medios. Arcópoli recuerda que la ley española está por encima del adoctrinamiento religioso.
Desde la asociación consideran que los los centros educativos sufragados con fondos públicos no deben permitir que «se adoctrine a menores de edad afirmando que determinadas leyes españolas parecen “fanatismo terrorista” porque clamen por la igualdad para homosexuales, transexuales y bisexuales».
La ley LGTB de la Comunidad de Madrid reivindica el derecho a la integridad psíquica, en todas las fases de su vida y los ámbitos de actuación así como defiende el reconocimiento de la personalidad incluido el derecho de la persona a construir una autodefinición con respecto a la orientación sexual. Arcópoli denuncia que esto se ve claramente vulnerado en este centro educativo de la CAM. Según esta ley, la Consejería de educación favorecerá la realización de actividades específicas para el reconocimiento de la igualdad del colectivo LGTBI y exigimos a esta Consejería que así lo haga y si no se cumple, se retire el concierto educativo, por vulneración de la ley LGTB.
Yago Blando, Coordinador de Arcópoli, exige que la Consejería de Educación se implique y exija a este colegio que desafía las leyes, la realización de acciones de respeto hacia el colectivo LGTB en el centro para salvaguardar su dignidad y la igualdad de todos los alumnos: “es inadmisible que hoy en día se afirme que educar en igualdad y tratar de eliminar prejuicios homófobos sea tachado como “fanatismo terrorista” y sufragado con fondos públicos de la Comunidad de Madrid”.