En el segundo fin de semana de la Bienal de Flamenco de Sevilla, el cartel aparece lleno de grandes artistas y la promesa de espectáculos auténticos y de calidad. Es en festivales como éste donde se verifica como las mujeres en el flamenco se han hecho con su sitio en los escenarios y el reconocimiento de un público que es variado y exigente. El flamenco, como todas las disciplinas artísticas también ha sido un campo de batalla para cantaoras y bailaoras (sigue siendo un campo a conquistar por mujeres guitarristas o percusionistas) que han luchado para poder pasar de ser acompañantes o pequeñas figuras, a ser cabezas de cartel y liderar compañías y montajes propios.
Las mujeres han encontrado en el flamenco la combinación perfecta de tradición y modernidad con la que bailaoras de la talla de Rocío Molina, Eva la Yerbabuena llenan teatros e inauguran nuevas corrientes, como también lo hacen Israel Galván o Andrés Marín. También la tradición “más auténtica” representada como artistas de la talla de Dolores Agujetas o la joven María Terremoto (la primera mujer de una de las familias más representativas del cante de Jerez que se dedica profesionalmente al cante) sigue marcando el camino y manteniendo la esencia del cante jondo.
Este fin de semana, el público de la Bienal (cada vez más heterogéneo en orígenes, gustos, edades…) podrá disfrutar del cante de Esperanza Fernández con el piano de Gonzalo Rubalcaba; de Juana la del Pipa como una de las cantaoras del cuadro flamenco del cante de Jerez; la bailaora Pastora Galván como artista invitada en el homenaje de Manuel Valencia al Lebrijano o la cantaora como Rocío Márquez que estará junto con Fahmi Alqhai (uno de los más importantes intérpretes de viola da gamba del mundo).
Que lo disfruten.
Gran presencia de mujeres artistas en el cartel de la Bienal de Flamenco de Sevilla
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