La Asociación de Mujeres Juezas (AMJE) ha mostrado su repulsa al «contenido machista y discriminatorio por razón de origen» que se desprende de las conversaciones entre varios jueces y el empresario Miguel Ángel Ramírez. En las grabaciones, aportadas por el juez Salvador Alba en la causa penal abierta por el supuesto delito de negociación prohibida con funcionarios, se escucha a varios magistrados de la Audiencia Provincial de Las Palmas refiriéndose a «las rumanas, todas putas…», entre otras consideraciones machistas y racistas.
AMJE ha esperado unos días para emitir un comunicado de repulsa a la espera de que hubiera un desmentido de la autoría por parte de dichos magistrados, cosa que no ha ocurrido y que, para AMJE refleja la veracidad de lo grabado.
«Es evidente que el machismo está bien instalado en la justicia y también que los estereotipos sexistas son incompatibles con una justicia igualitaria y equitativa», manifiestan.
AMJE ha calificado estas conversaciones como «lamentable espectáculo que evidencia el anclaje del machismo en la justicia» y han recordado, con preocupación, que los mismos autores de estos calificativos son «magistrados que juzgan diariamente delitos de trata de personas, prostitución o agresión sexual».
En este sentido, han apuntado a que, si bien la judicatura es víctima de los prejuicios en los que se funda el machismo, tiene en este caso «el agravante de que quienes formamos parte de ella somos, precisamente, quienes tenemos la obligación de garantizar que tales discriminaciones no se produzcan y proteger a quienes son víctimas de ellas».
AMJE insiste también en la urgente necesidad de «mucha formación de género en la carrera».