Casi el 70% de los españoles y españolas está en contra de la legalización del alquiler de vientres, según el sondeo Tribuna Feminista /PerimetricaConsulting.
El 48% de quienes han respondido la encuesta dice estar en contra «en cualquier caso (tanto si media pago como si no)», mientras que el 19,2% sólo lo aceptaría si es de forma altruista. El 16% asegura que debe estudiarse caso por caso.
La legalización del alquiler de vientres es uno de los debates que los lobbys que trabajan para legalizar el uso del cuerpo de las mujeres han instalado en la sociedad española. Ciudadanos es el primer partido que se ha posicionado públicamente a favor de legalizarlo.

La derecha y el colectivo Gay se divide
El alquiler de vientres genera todavía muchas dudas en en colectivos gays. La encuesta, sin embargo, refleja una negativa mayoritaria a legalizar el alquiler de vientres en votantes de todos los partidos, salvo en Ciudadanos, partido que abandera la causa y que ya presentó en Madrid una iniciativa puramente mercantilista. Entre simpatizantes de PSOE y Podemos los porcentajes de quienes están en contra es muy elevado.
Nueve de cada diez votantes del PSOE están en contra. El 83,2% la rechaza en todo caso y un 8,6% la acepta solo si es altruista. El 73,4% de votantes de Unidos Podemos está en contra, incluso si es «altruista».
Entre quienes votan al PP, hay menos claridad de opinión. Según la encuesta, el 51,6% se declara a favor, mientras que el 31,2% lo rechaza.
Ciudadanos se comprometió a promover una ley que legalizase la explotacion reproductiva en su programa electoral del 26-J.
El PSOE, Podemos, y PP, no han fijado posición. Muchos socialistas se han manifestado en contra de la explotación reproductiva al igual que Unidos Podemos.
El alquiler de vientres goza de una amplia oposición en el colectivo LGTBI, mientras que la mayoría de las organizaciones feministas está abiertamente en contra, ya que lo consideran una mercantilización del cuerpo.
NOTA: Esta noticia es paródica de la encuesta publicada en un periódico Español que ofreció datos estadísticos similares sin indicar ficha técnica de la encuesta ni ofrecer ningún dato que permitiese identificar fuentes de veracidad.