La norma establece la despenalización cuando:
- esté en riesgo la vida de la madre, 20 votos a favor contra 14
- inviabilidad fetal, 19 votos a favor y 14 en contra
- en casos de violación, 18 a favor y 16 en contra
El proyecto de ley tenía por objeto autorizar la interrupción del embarazo en tres causales, ofreciendo alternativas que respeten el derecho de las mujeres a expresar libremente su voluntad al respecto, sea que deseen continuar el embarazo u opten por interrumpirlo.
DEBATE INDICACIONES
En la tercera jornada de debate en particular se sometieron a votación las indicaciones presentadas a la primera causal en especial la impulsada por el senador Andrés Zaldívar, en orden a precisar que “no se estaba despenalizando” algo que en la actualidad no es aborto, es decir, intervenir para salvar la vida de la madre.
En este punto se hicieron presente las distintas posturas antagónicas pues tal como ocurrió en la jornada anterior, la interpretación de la indicación para algunos era imprecisa e inducía a error, pues el texto propuesto repone lo que se conoció como aborto terapéutico hasta el año 89.
Durante el debate intervinieron los senadores Andrés Allamand, Andrés Zaldívar, José García Ruminot, Jaqueline Van Rysselberghe, Rabindranath Quinteros, Carlos Bianchi, Alfonso de Urresti, Lily Pérez San Martín, Fulvio Rossi, Alberto Espina, Baldo Prokurica, Francisco Chahuán, Ricardo Lagos Weber, Patricio Walker, Juan Antonio Coloma, Guido Girardi, Ena Von Baer, Alejandro Guillier, Manuel José Ossandón, Iván Moreira y Alejandro Huidobro.
Finalmente, la indicación se rechazó por un voto y también se desestimaron todas las indicaciones renovadas que tenían una redacción similar. Asimismo se rechazó por 20 votos contra 14 aquella indicación que proponía suprimir la primera causal.
PELIGRO VITAL DE LA MUJER EMBARAZADA
Con posterioridad se procedió a discutir y votar la primera causal según el texto propuesto por las Comisiones. La norma se aprobó por 20 votos a favor y 14 en contra tras un amplio debate, donde incluso se realizó reserva de constitucionalidad por parte del senador Francisco Chahuán, coincidió el senador Coloma quien señaló que esta disposición “incumple el deber de protección constitucional”.
Los senadores García Ruminot, Espina, Chahuán, Allamand, Van Rysselberghe, Coloma, Von Baer, Espina, Larraín, Pérez Varela y García Huidobro lamentaron que no hubiese prosperado la indicación presentada por el senador Zaldívar pues “se trata de causales totalmente distintas e hicimos esfuerzos para separarlas”. “Se buscaba que la acción se dirija a defender la vida de la madre pero tal como está redactada la norma no es así” e incluso señalaron que podría darse una mala utilización de la misma, tal como ocurrió hacia 1989.
Por su parte, los senadores Pizarro, Lagos Weber, Araya, Allende y Navarro, recalcaron que se requiere dar certeza jurídica y lo que hace la primera causal es reponer lo que ocurría antes de 1989 que incluso tenía un sentido más amplio que esta causal que tiene una propuesta más restrictiva”. Agregaron que “no es necesario demostrar que se trata de causales distintas, porque es evidente que son temas distintos”. Asimismo desestimaron que se produzca una mala utilización de esta causal pues no se puede pensar que “un equipo médico se pueda coludir para inventar una causal de esta naturaleza”.
INVIABILIDAD FETAL
Con la aprobación por mayoría los legisladores respaldaron la segunda causal para despenalizar la interrupción del embarazo cuando: «el embrión o feto padezca una patología congénita adquirida o genética, incompatible con la vida extrauterina independiente, en todo caso de carácter letal».
Anterior a esta votación se sometió a escrutinio la indicación renovada de los senadores Jacqueline Van Rysselberghe y Francisco Chahuán, que proponía la supresión de la mencionada causal, la que fue rechazada por 15 votos a favor y 20 en contra.
Una postura más liberal hicieron presente los parlamentarios Fulvio Rossi, Juan Pablo Letelier, Guido Girardi, Adriana Muñoz, Jaime Quintana y Alejandro Navarro, para quienes la salud sexual y reproductiva de las mujeres es un tema «muy íntimo» y deben tener la posibilidad de decidir libremente ante la inviabilidad fetal.
En tanto, los senadores Carlos Bianchi y Baldo Prokurica, reclamaron por la desigualdad que podrían enfrentar las mujeres de regiones, por la falta de especialistas para confirmar el diagnóstico, pues se requiere de dos opiniones de médicos especialistas.
A su turno, el senador Jorge Pizarro remarcó que los senadores de la Democracia Cristiana «no somos partidarios del aborto», pero es fundamental que se evite a las mujeres «enfrentar esta dramática situación de llevar en el vientre un feto sin posibilidades de vivir, por ello también la mujer debe sentirse acompañada y contar con apoyo», lo que fue respaldado por los senadores Ignacio Walker, Andrés Zaldívar y Carolina Goic.
CAUSAL DE VIOLACIÓN
La Sala del Senado aprobó con 18 votos a favor y 16 en contra la tercera causal que despenaliza el aborto en casos de violación. Previamente, con 16 votos a favor y 18 en contra, había rechazado una indicación para suprimir dicha causal.
De este modo, el proyecto establece que se autoriza la interrupción del embarazo cuando “sea resultado de una violación, siempre que no hayan transcurrido más de doce semanas de gestación. Tratándose de una niña menor de 14 años, la interrupción del embarazo podrá realizarse siempre que no hayan transcurrido más de catorce semanas de gestación”.
El debate de esta causal estuvo cruzado por argumentos en torno a no revictimizar a la mujer que ha sido violada y darle la posibilidad de optar por continuar o no con el embarazo.
Algunas de las defensoras de esta causal ponen de manifiesto, como Isabel Allende que “la violencia sexual contra las mujeres es de las acciones más deleznables que puede sufrir una mujer y si producto de esa relación forzada resulta un embarazo, creo que la sociedad debe darle la oportunidad para que esa mujer libremente tome una decisión y debe tener las condiciones para tomar una decisión tan difícil”.
Lily Pérez, por su parte, defendió que “tenemos que darle todas las posibilidades a la mujeres que van a tomar una decisión tan compleja de poder ser disuadida o no. Siento que en esta causal hay un poco de hipocresía en el debate…me llena de rabia que se diga tan fácilmente que ese mujer violada pueda seguir adelante con ese embarazo. Es la mujer quien debe decidir”.
Rabindranath Quinteros, denuncia que “en Chile 17 personas son violadas cada día, el 74% afecta a menores de 18 años y el 10% de las víctimas quedan embarazadas…en la mayoría de los casos el autor de la violación es un familiar o del círculo cercano ¿Qué le decimos a estas niñas?,¿que no podrán elegir? Ya demasiado daño han recibido y demasiado dolor han debido soportar”.
“No convirtamos este drama en una tragedia. En este proyecto no hay un ensañamiento contra el feto, hay un acompañamiento a la mujer enfrentada a una situación trágica que solo ella puede aquilatar. En este espacio solo cabe reconocer un espacio de discernimiento a esas mujeres dañadas que no son delincuentes”, reclama Ignacio Walker.
Ricardo Lagos manifestó que el ordenamiento jurídico chileno sanciona penalmente el aborto «…hoy las mujeres que son violadas y no denuncian no les preocupa a nadie, pero si se embarazan ahí se preocupan. ¿Quien soy yo, para exigirle a ella llevar a término ese embarazo? Como sociedad chilena queremos o no que una mujer chilena que ha sido violada siga o no con un embarazo”.
Adriana Muñoz “hay cifras que nos informan que en Chile cada 25 minutos una mujer es violada…somos las mujeres los sujetos de derechos, con capacidades y libertad de decidir. ¿Por qué tenemos que quedar impávidas ante un acto de tanta violencia como es la violación?”.