Más de 90 organizaciones feministas del Estado español y de 12 países han coorganizado la III Marcha Abolicionista que se hará este sábado 8 de mayo. Se trata de una reivindicación, que promueve y convoca Mujeres por la Abolición desde 2019, exigiendo la abolición de la prostitución, de la pornografía y prohibición de la explotación reproductiva (“vientres de alquiler”). La primera edición de esta iniciativa se hizo presencialmente, en los barrios más castigados por la prostitución de Barcelona, contando con la colaboración de compañeras francesas y de la superviviente Rosen Hicher. Fue una jornada histórica que abrió brecha en España y en la que nos encontramos con mujeres prostituidas increpándonos por encargo de los proxenetas, con regulacionistas que nos lanzaron polvos de colores al pasar por la zona más conflictiva (supimos que les pagaron para ello), pero también con una ciudadanía agradecida por nuestra acción. La prensa de cobertura nacional, incluidas las principales cadenas de televisión , agencias y diarios , difundió ampliamente nuestro trabajo.
La II Marcha Abolicionista se estuvo trabajando para llevarse a cabo en las calles de Madrid el 9 de mayo de 2020. Sin embargo, tuvo que hacerse de manera virtual a causa de la pandemia y pese a ello consiguió una proyección internacional en las redes sociales inusitada. Esa edición tenía previsto acabar la II Marcha en un Congreso y continuó con la idea. Así, se empezó hablando con las ponentes, que se mostraron muy colaboradoras, y se consiguió hacer realidad que el Congreso final pudiera ofrecerse en septiembre de manera virtual, adaptándose a las exigencias sanitarias. Las ponentes fueron Julie Bindel, Gail Dines, Janice Raymond, Ingeborg Kraus, Renate Klein, Raquel Rosario Sánchez y Alika Kinan, con una media de asistencia de 300 personas al día. En esa ocasión se incluyó también un debate crítico sobre la abolición del género y los trabajos se realizaron con la colaboración de 29 organizaciones feministas de dentro y fuera de España, terminándose con la lectura de nuestro manifiesto que había recogido, a esas alturas, miles de firmas de apoyo.
La III Marcha de este sábado 8 tendrá el mismo formato virtual y se espera que obtenga mayor proyección internacional. El cálculo del recorrido que alcance la III Marcha se hará, como el año anterior, atribuyendo 1 kilómetro de camino por cada interacción en redes sociales. Realizaremos también el Congreso en septiembre con ponentes de significativa transcendencia hoy en el feminismo radical y, como en la edición anterior, podéis firmar nuestro manifiesto aquí realizado a tenor de los más recientes y agresivos intentos de eliminar los derechos de las mujeres y los de nuestras hijas e hijos.
a) {La III Marcha de este sábado 8 tendrá el mismo formato virtual y se espera que obtenga mayor proyección internacional. El cálculo del recorrido que alcance la III Marcha se hará, como el año anterior, atribuyendo 1 kilómetro de camino por cada interacción en redes sociales. Realizaremos también el Congreso en septiembre con ponentes de significativa transcendencia hoy en el feminismo radical y, como en la edición anterior, podéis firmar nuestro manifiesto aquí realizado a tenor de los más recientes y agresivos intentos de eliminar los derechos de las mujeres y los de nuestras hijas e hijos.}
Pues, el Siglo 21 con el discurso del elemento denominado coronavirus narcisista paranoico patriarcal sobre la psique de la población mundial adulta, la invade con el miedo terrorífico a la muerte, endógenamente nacido como un estado crónico.
Neurosis y psicosis son perturbaciones engendradas por conflictos en la infancia, que tradicionalmente se había cerrado a la investigación de la ciencia, desechando el ocuparse seriamente hasta la llegada del psicoanálisis (Freud) que, permite extender a tiempos pasados a los genios del pretérito, a las mitologías, religiones y formas sociológicas que, hoy, el narcisista paranoico poder globalizado patriarcal con su control total en la población mundial, ya, está en condiciones de utilizarlo sobre los adultos, incluido más del 50% de la humanidad, la mujer.
El narcisista paranoico poder globalizado patriarcal, en este nuevo orden, actúa sobre la psique de la población mundial adulta, invadiéndola con el afecto de angustia incapacitándola de suprimirla por medio de una reacción adecuada de un peligro procedente del exterior, como el que provoca el siniestro espejito de color del discurso del elemento denominado coronavirus, cayendo en la neurosis de angustia al sentirse incapaz de hacer cesar el miedo terrorífico a la muerte, despersonalizados al límite con barbijos en este programa de reducción de la población mundial.
Así, el narcisista paranoico poder mundial globalizado patriarcal, con el concurso de sus acólitos, en cada área mundial mediante políticos/seudocientíficos como jefes aborígenes machos de este nuevo orden mundial, abre esta excitación exógena como un impulso único, y la endógena como una fuerza constante de miedo terrorífico a la muerte sobre los adultos, despersonalizados.
Ahora bien esta aplicación de miedo terrorífico a la muerte sobre los adultos, que utiliza el narcisista paranoico poder mundial globalizado patriarcal, en este nuevo orden mundial, lo “perfecciona” en su sometimiento, sobre los temores, angustias y desafíos que se abren entre los niños y niñas con el encierro, sobre el uso de las pantallas y la exposición al morbo de los medios en la problemática del desarrollo infantil respecto del confinamiento, despersonalizados al límite con barbijos: Lo esencial en considerar será que, no son los sucesos mismos generados en la situación de confinamiento —- un real campo de concentración —, los que actúan traumáticamente, sino su recuerdo emergente cuando el individuo haya llegado a la adolescencia y madurez.
Este “perfeccionamiento” del narcisista paranoico poder mundial globalizado del patriarcado, en este nuevo orden mundial, mediante este real confinamiento, derivará en una serie de “costumbres” patológicas, síntomas y fobias por medio de su referencia a las presentes experiencias destructivas infantiles y el enlace lógico de las manifestaciones neuróticas en el futuro, que hará imposible rechazar dichos recuerdos de la niñez, fielmente conservados. Claro está, que será inútil querer interrogar en el futuro al adulto sobre estos traumas infantiles del actual y real confinamiento fuera del psicoanálisis, pues su huella no se encuentra jamás en la memoria consciente y si solo en los síntomas patológicos, que ha provocado el narcisista paranoico poder mundial globalizado patriarcal y el concurso de los acólitos jefes aborígenes machos políticos/seudocientíficos en esta estructura de sometimiento en cada área mundial. Para que lo femenino., nuestra única esperanza, pueda modificar la civilización del narcisista paranoico transexual patriarcado, es necesario aquilatar la acumulación de la gran cantidad de “experiencia”, de la mujer, más del 50% de la humanidad, en sus sistemas mnémicos y la diversa fijación de las relaciones provocadas en éste material mnémico, por distintas adaptaciones, en el transcurso de milenios por las sucesivas generaciones del varón; irresoluble perverso y ambiguo sexual.
El narcisista paranoico poder globalizado patriarcal utiliza los elementos aportados por el psicoanálisis (Freud), con los acólitos jefes aborígenes machos políticos/seudocientíficos, en cada área mundial, mediante el espejito de color denominado elemento coronavirus, incapacitando a la población de hacer cesar el miedo terrorífico a la muerte como un estado crónico, despersonalizados al límite con barbijos. La realidad es inevitable, independientemente de la percepción.
Buenos Aires
Argentina
Osvaldo V. Buscaya (OBya)
Psicoanalítico (Freud)
7/5/2021