Es época de ceremonias y entregas de premios a las películas estrenadas en el 2014. Los Globos de Oro ya pasaron, y quedan por celebrarse los Goya y los Oscar, cada uno con sus nominaciones correspondientes y las predicciones de favoritos que siempre hacen revistas especializadas, profesionales de la crítica cinematográfica y gente común y corriente que se aventura a hacer sus apuestas de ganadores.
Resulta muy apropiado este año utilizar el masculino plural para hablar de “favoritos y ganadores”, y no de “favoritas y ganadoras” en los premios que se darán en la próxima ceremonia de los Goya. Quitando los premios a mejor actriz, mejor actriz secundaria y reparto, que está claro que sí tienen a mujeres como nominadas, el resto de los premios está absolutamente copado por la presencia masculina, demostrando, una vez más, que la cultura cinematográfica aún está muy lejos de visibilizar una igualdad real entre los hombres y mujeres dedicados a este sector.
A continuación, mostramos esta sencilla tabla que recoge el número de hombres y mujeres nominadas en casi todas las categorías*:
Lo que se ve, es lo que hay. De las categorías de dirección, y dirección novel, sólo una mujer, opta por un Goya, en este caso Beatriz Sanchís, a mejor directora novel por “Todos están muertos”. Por supuesto, esto también se extiende a los directores de las películas nominadas, que son todo hombres. Si seguimos con el escrutinio en el resto de categorías, nos encontramos con cuatro mujeres nominadas como son, Mapa Pastor, por “El Niño”, la directora venezolana Claudia Pinto, con una nominación para “La distancia más larga” como mejor película iberoamericana, Anna Soler-Pont, nominada a mejor guión adaptado, y otras dos mujeres, Esther García, nominada a mejor dirección de producción por “Relatos Salvajes” y Manuela Ocón por “La Isla Mínima”.
Además de ellas, las categorías en las que también encontramos mujeres son, por supuesto, en maquillaje y/o peluquería y diseño de vestuario con 4 y 2 nominadas respectivamente. Mientras que, como se puede ver en la tabla, ninguna otra mujer aspira a los premios de mejor fotografía, dirección artística o efectos especiales. El resto de las categorías de nominaciones sigue confirmando esta tendencia que más parece un España-Malta de género (hombres 12-mujeres 0), que unos premios de una Academia de Cine española en el año 2015, siglo XXI.
No hace falta explicar mucho más, porque los números, como siempre, hablan por sí solos. Como por sí solos hablan también los hombres con nominaciones (82% del total), frente a las pocas poquísimas mujeres nominadas (18%), que más que hablar, tendrían que gritar para que se les oyera. Y no es cuestión de que no existan mujeres en el cine, existen y dirigen películas y las producen, y escriben guiones, pero no están. ¿Por qué?
Pues, en esencia, porque la igualdad sigue siendo una ficción en el mundo de la cultura, como también lo es en otras esferas de la vida, como la política, la economía o el poder, como bien ha demostrado el reciente nombrado gobierno de Syriza en Grecia, que no ha nombrado a ninguna mujer como ministra. La desigualdad de género continúa estando de absoluta actualidad y por ello es necesario seguir nombrándola, sacándola a la luz. El casi simbólico número de mujeres, profesionales de la industria del cine, con nominaciones en los premios Goya, no puede pasar desapercibido. No puede no ser evidenciado, señalado, reivindicado.
A modo de conclusión, y mensaje a cinéfilos y cinéfilas en general, y a aquellos que se molesten con este artículo, aclararles (que es un ejercicio que las feministas hacemos a menudo: aclarar lo que decimos) que, obviamente, la perspectiva feminista no nos ciega ni impide que hayamos disfrutado con películas como La Isla Mínima, una de las favoritas para este año.
Pero que las mujeres estén infrarrepresentadas en la cultura cinematográfica de este país, nos preocupa, a nosotras como feministas, y creemos que también debería preocupar a la Academia de Cine, a las asociaciones relacionadas con el gremio y a las escuelas de cine, en las que ahora mismo, hay muchas chicas preparándose para formar parte de futura cultura cinematográfica de este país.Muchas chicas que necesitan espacio, impulso, oportunidades, y el reflejo de una Academia de Cine más abierta y que apueste por que la igualdad entre mujeres y hombres deje de ser ficción para convertirse en una realidad con más visibilidad, más reconocimiento, más nominaciones.
*No se incluyen las nominaciones a mejor actor y actriz (principal, secundaria y de reparto), al tener igual número de nominaciones. Tampoco se han incluido las nominaciones a mejor música original, mejor canción original y mejor película europea.
**En la categoría de “Maquillaje y Peluquería” y “Película documental” se han contabilizado a todas las personas que componen la nominación, por lo que el número es mayor que en el resto de categorías en el que sólo se ha tomado como referencia una persona en las nominaciones unipersonales y aquellas en las que el grupo de personas nominadas no incluía ninguna mujer.