Teodora del Carmen Vásquez es la mujer salvadoreña que se encuentra cumpliendo 30 años condena carcelaria en su país por haber dado a luz a un bebé muerto. Así lo denuncian desde Amnistía Internacional, organización que encabeza una campaña para exigir su puesta en libertad.
En 2008 Teodora, que entonces tenía 24 años, fue condenada a 30 años de prisión por homicidio tras dar a luz a un bebé muerto. Según cuentan desde la organización, Teodora comenzó a sentir fuertes dolores y para cuando llegaron los servicios de emergencias, ella estaba inconsciente, había roto aguas y el bebé estaba muerto. Fue entonces cuando la policía la detuvo y la acusó de homicidio; no fue atendida en un hospital hasta varias horas después, donde finalmente la llevaron tras detenerla. «Durante el embarazo no pudo asistir a los controles médicos debido a su falta de recursos económicos y a una jornada laboral de 6 de la mañana a 9 de la noche», denuncian desde Amnistía Internacional.
Desde la organización denuncian las irregularidades del proceso judicial, «careció de una buena defensa (por la imposibilidad de poder costearse una) y se presumió desde su inicio la culpabilidad de Teodora».
El Salvador cuenta con una de las leyes más restrictivas en materia de aborto del mundo. El aborto es ilegal en todas las circunstancias, incluso en casos de violación, incesto, peligro para la vida o la salud de la mujer o malformación grave y mortal del feto. También es un delito ayudar a una mujer o a una niña a someterse a un aborto.
Junto al caso de Teodora se sitúan más de 200 mujeres denunciadas por abortar en El Salvador en los últimos cuatro años.
Campaña de Amnistía Internacional exigiendo la libertad de Teodora.