El 17 de mayo, se celebran 26 años desde la eliminación de la homosexualidad de las listas de enfermedades mentales por parte de la Organización Mundial de la Salud
Con motivo del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia los eurodiputados socialistas Eider Gardiazabal, José Blanco y Jonás Fernández han presentado esta semana una declaración de la Eurocámara en la que se exige a la UE que tome medidas para combatir la homofobia, promover la igualdad de trato y la no discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género, para contribuir a la prevención y erradicación del acoso en este contexto y promover servicios que proporcionen apoyo a las víctimas de esta discriminación.
«Condenamos enérgicamente toda discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género; no puede ser que los derechos fundamentales de las personas lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersexuales (LGBTI) no sean respetados siempre en la UE. Con esta Declaración escrita, exigimos que la UE dé una respuesta contundente a estos delitos», ha señalado la eurodiputada Eider Gardiazabal.
Según la Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA), una de cada dos personas LGBT se ha sentido discriminada o acosada por razones de orientación sexual, una de cada cuatro ha sido agredida físicamente, y una de cada cinco ha sido objeto de discriminación en su empleo o trabajo. En España, la discriminación contra las personas LGTB supone más del 30% de los casos de delitos de odio. Se producen agresiones a diario y muchas de estas víctimas deciden no denunciar por miedo. «A pesar de los tímidos avances, estos datos, ponen en evidencia que, en la actualidad, la Unión Europea carece de una política global de protección de los derechos fundamentales de las personas LGBTI», ha añadido Gardiazabal.
«Si algo nos mueve como europeos es la defensa de los derechos humanos y los derechos LGTBI son derechos humanos. Europa no puede permanecer impasible cuando aún hoy en día 93.000 personas LGTBI sufren acoso por razón de orientación sexual e identidad de género en sus Estados miembros. Urge actuar para garantizar que cada persona pueda vivir libremente su vida, sin temor, sin discriminación», ha reclamado el eurodiputado socialista José Blanco.
Igualmente, Jonás Fernández ha lamentado que por parte de las instituciones no esté haciendo lo «suficiente» para combatir la discriminación y el rechazo contra la homosexualidad y la transexualidad. «La UE debe hacer un mayor esfuerzo con el fin de despenalizar la homosexualidad y acabar con la persecución de las miles de personas que no pueden ejercer con libertad su orientación sexual», y ha abogado por abordar este problema de manera transversal introduciendo esta perspectiva en todas las políticas de la UE.