Tal día como hoy, en 1589, María Mayor Fernández de Cámara y Pita (Sigrás, 1565 – 1643), conocida como María Pita, defendía La Coruña contra la Armada Inglesa.

El 3 de mayo de 1589 las tropas inglesas, habiendo cercado la ciudad de La Coruña, abrieron una brecha en la muralla y comenzaron el asalto de la ciudad vieja, dirigidas por un alférez que, con la bandera de la resistencia en mano, logró subir a la parte más alta de la muralla. María Pita mató al alférez inglés. No se sabe realmente con qué arma se llevó a cabo la muerte del alférez; hay quien dice que con la espada del marido difunto de María Pita (su segundo esposo Gregorio de Recamonde, muerto en ese mismo asalto inglés); otros que con cuchillos de su negocio personal; otros que con arma de fuego.
La tradición dice que este hecho se llevó a cabo al grito (en gallego) de «Quen teña honra, que me siga» (que en castellano significa: «quien tenga honra que me siga») y que esto desmoralizó a la tropa inglesa, compuesta por 12.000 efectivos, y provocó su retirada. Junto con María Pita, otras mujeres de La Coruña ayudaron a defender la ciudad; está documentado el caso de Inés de Ben, que fue herida en la batalla.