Durante los seis primeros meses del año ADAVAS Salamanca (Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Violencia de Género) ha atendido a 108 casos, de los cuales 78 casos estaban relacionados con violencia de género y 30 con violencia sexual, según han publicado en su Informe del Primer Semestre 2016.
Entre los datos publicados por ADAVAS Salamanca se incluyen que en 28 casos las víctimas fueron menores de edad (el 39% de ellos por situaciones de maltrato).
También recogen 22 casos de víctimas de origen extranjero, lo que supone un incremento de las actuaciones con mujeres de origen extranjero con respecto al año 2015. El 77% de estos casos eran por situaciones de violencia de género por su pareja o expareja.
El 73 % de los casos de delitos sexuales eran personas del entorno de las víctimas.
En el 40% de los casos por delitos sexuales, las víctimas eran menores de edad y en el 17% la petición de ayuda la realizaron adultos/as en los que el abuso o agresión se produjo cuando eran menores de edad.
En cuanto a la relación con el agresor, en el 73 % de los casos eran personas del entorno de las víctimas. Respecto a la incidencia de la agresión, en el 50% de los acaso atendidos fue una agresión reiterada en el tiempo.
El 80% de las víctimas interpone denuncia de los hechos.
Área rural y desempleo
ADAVAS destaca también un aumento de la violencia de género en áreas rurales: el 40% de las mujeres residían en el área rural, lo que supone un 26% más que en el mismo periodo de 2015.
En cuanto a situación laboral, el 46 % de las mujeres estaban en situación de desempleo. El 38 % contaban con empleo y el 8% cursaban estudios.
Menos víctimas denuncian pese a aumento de sentencias condenatorias
ADAVAS publica también el número de personas atendidas en su despacho jurídico, y concluye que, si bien se mantiene el número de víctimas atendidas, existe un moderado descenso en el número de denuncias por malos tratos; en cambio, en los delitos sexuales la práctica totalidad de las víctimas interponen denuncia.
El 40% de las mujeres residían en el área rural, un 26% más que en el mismo periodo de 2015
Resulta sorprendente el descenso en el número de denuncias, ya que las sentencias condenatorias por malos tratos y delitos sexuales han aumentado respecto del mismo período del año anterior.
Algunas de las causas para no interponer denuncia por violencia de género esgrimidas son miedo, vergüenza, cuestiones económicas, dependencia emocional, y desconfianza en la respuesta de la administración de justicia, entre otras.
ADAVAS concluye que, en cuanto a los procedimientos de malos tratos, se comprueba una tendencia en resolver tales asuntos por delitos leves (las anteriores faltas) y asimismo, “no se está ni acusando por el Ministerio Fiscal ni condenando por los Tribunales el delito de maltrato habitual del art. 173.2 del Código Penal, considerando y enjuiciando solo el último episodio violento, con lo cual la sanción y las consecuencias penales para el agresor son más leves”.
ADAVAS entiende que se debe poner en la “misma balanza” los derechos de los imputados y su presunción de inocencia como los derechos de las víctimas.
En los últimos períodos se comprueba una tendencia a denegar multitud de medios de prueba, como puede ser una valoración psicológica de la víctima por parte de los profesionales de los Juzgados (psicólogos, forenses, equipo psicosocial, etc.), creando una clara indefensión a los intereses de las víctimas.
ADAVAS entiende que se debe poner en la “misma balanza” los derechos de los imputados y su presunción de inocencia como los derechos de las víctimas, ya que de manera contraria se estaría vulnerando el principio de la tutela judicial efectiva.