- Francia estudia penalizar webs antiabortistas que desinforman sobre la interrupción voluntaria del embarazo.
La Asamblea Nacional Francesa aprobaba la semana pasada una proposición de ley, promovida por el partido socialista, para penalizar la difusión de contenidos falsos e informaciones erróneas sobre la interrupción voluntaria del embarazo. Si bien desde 2014, intentar impedir el acceso a la información sobre el aborto o ejercer presión sobre las mujeres o el personal médico está penalizado con dos años de cárcel y 30.000 euros de multa, ahora se busca incluir también webs que intentar obstaculizar, impedir o presionar a las mujeres que hayan decidido libremente sobre su embarazo.
La Asamblea votaba en medio de una gran polémica por las quejas de los grupos anti-elección, cuyas webs son precisamente las que se encuentran en el punto de mira de la ley; el partido socialista argumenta la desinformación que estas páginas antiaborto publican y que no coincide con la de la web del Ministerio de Sanidad, y que suponen confusión para las mujeres que buscan online. Desde el partido han señalado también que la información falsa publicada en estos sitios tiene la clara intención de «culpabilizar a las mujeres».
Además de grupos antielección, se han opuesto categóricamente la derecha francesa, la ultraderecha y la Iglesia católica ya que consideran que así se vulnera su libertad de expresión, argumentando que simplemente ofrecen, con estas webs, «alternativas al aborto».
Laurence Rossignol, ministra de Familia, Infancia y Derechos de las Mujeres, señala que la libertad de opinión es libre y que «cualquiera pueda manifestar estar contrario al aborto, en internet o donde sea. Pero debe hacerse con honestidad y argumentos reales, no con manipulación y confusión. Grupúsculos antiabortistas se esconden tras plataformas de apariencia neutra y objetiva que imitan las páginas institucionales de información e intentan deliberadamente engañar a las mujeres. Peor aún, hay militantes sin ninguna formación que culpabilizan a las mujeres e intentan desanimarlas de recurrir al aborto».