Patriarcales los dos, pero uno más astuto que el otro

Pilar Aguilar
Pilar Aguilarhttp://pilaraguilarcine.blogspot.com.es/
Analista de ficción audiovisual y crítica de cine. Licenciada en Ciencias Cinematográficas y Audiovisuales por la Universidad Denis Diderot de París. Lee el blog de cine de Pilar Aguilar: http://pilaraguilarcine.blogspot.com.es
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El PSOE, durante el gobierno de Zapatero, apoyó importantes demandas feministas y legisló favorablemente en asuntos claves: aborto, violencia machista, igualdad (aunque esta última ley la dejó a medio). En consecuencia, se colgó el título de “partido feminista”. Pero, por lo visto, luego, decidió vivir eternamente de las rentas. Y así, por ejemplo, en las comunidades autónomas que gobernaba, no solo no trabajaba activamente por mejorar la vida de las mujeres, sino que promovía y apoyaba con entusiasmo las leyes trans.

Las feministas del PSOE no perdían, sin embargo, la esperanza. Pensaban que, cuando volviera a gobernar, legislaría y tomaría medidas favorables para las mujeres. Esperaban tiempos mejores… Llegaron esos tiempos y “res de res” (a veces “hablo” catalán, como aquel sujeto de infausta memoria).

Cuando aparece Podemos en el panorama político, sus militantes manifiestan por activa y por pasiva que ese “monopolio feminista” del PSOE las saca de quicio. Quieren quitarle el título a toda costa. Reclaman para sí el banderín del feminismo.

Pues qué bien, pensamos nosotras –nosotras las feministas que no teníamos partido por aquel entonces-: qué maravilla si esa competencia entre PSOE y Podemos los lleva a ver quién promueve más leyes y medidas feministas…

Una mosca detrás de la oreja sí teníamos. O sea, ingenuas del todo no éramos. Sobre todo, porque el PSOE, lejos de dar pasos por la senda feminista, destituyó de sus cargos y responsabilidades prácticamente a todas las feministas y las mandó a un rincón, diciéndoles: “Venga guapas, ahí os quedáis quietecitas y ya veremos: si en algún momento la presión feminista sube, os llamaremos de nuevo”. O sea, el clásico oportunismo: “Actúa como quieras, pero mantén un discurso que no queme naves por si algún día hay que recoger velas”.

Ante Podemos las feministas sentíamos una mezcla de recelo e ilusión. Recelo porque veíamos que muy pocas de sus militantes tenían idea de feminismo. Digo, idea fundada. Sí, cierto, todas se autoproclamaban feministas (¿quién se atreve a proclamarse lo contrario si quiere parecer moderno?), pero, en cuanto abrían la boca, mostraban que, más allá de cuatro slogans, no conocían nada del pensamiento y la teoría feministas…

Con todo, manteníamos la esperanza. Yo me dije: “Nadie nace feminista. Si le ponen interés y estudio, pueden aportar mucho. No, no está nada mal que algunas vengan de “nuevas”.”

Incluso pensé: quizá Podemos, con ese afán por sacarse el título de “máximo paladín del feminismo”, monte una agenda consistente, movilice con energía, sacuda todo lo que hay que sacudir…

Está claro: yo andaba en la inopia, pero el PSOE, no. Se frotó las manos y se dijo: “Estas nos van a hacer un apaño bárbaro. De medidas feministas, cero, pero son las que van a pagar el pato. Nosotros apoyamos esas políticas supermodernasguaysneoliberalesidentitarias, pero en retaguardia. Les damos el Ministerio de Igualdad y que sean ellas solitas quienes se desprestigien”.

políticas supermodernasguaysneoliberalesidentitarias

Y, en efecto: tal cual. No que ninguna feminista ignore la responsabilidad del PSOE, pero, como los otros andan tan crecidos y tan empeñados en pavonearse a cara descubierta, defendiendo lo indefendible, pues el PSOE puede permitirse el lujo de estar en un “discreto segundo plano”. Porque, además, Podemos, no solo no tiene ni la experiencia ni la retranca del PSOE, sino que ha mordido el anzuelo hasta el fondo. Y, a medida que han pasado los meses, se ha ido enrocando e infantilizando cada vez más. Resultan hasta patéticos… Cegados por la jactancia, sin ninguna contención ni cautela: ¿que hay que tirarle un ladrillazo a una disidente? Pues va la Ministra y aplaude entusiasmada. ¿Que hay que dar premios y honores, hacer nombramientos, crear cargos, emplear dinero en propaganda de toda clase de delirios trans? pues a saco, sin dejar ni un resquicio ni tomar precaución alguna…

Son tan incautos (por decirlo con palabras suaves) que ni siquiera les mosquea el hecho de que todo el feminismo les increpe. Bueno, es que ni se paran a analizar nuestros argumentos …

Al revés: cada vez más obtusos, más ciegos y más atrincherados. Su lema: “Sostenello y no enmendallo”.

Y cuando esta locura se desinfle (espero que las feministas consigamos imponer de nuevo nuestra agenda), entonces, el astuto PSOE saldrá del escondite y se presentará como el “sostenedor del feminismo que siempre fue”. Y lo hará sin necesidad ni siquiera de pedir perdón: un pequeño paso lateral, una sonrisa de entre ingenuidad y despiste, la promoción de alguna feminista a un puesto destacado y, hala, al carro triunfal.

Podemos, sin embargo, no va a tener ni margen para disculparse, ni un minúsculo salvavidas al que aferrarse…

¿Me dan pena? ninguna. Me da pena María Salmerón, me dan pena las mujeres explotadas dentro y fuera de casa, me dan pena las prostituidas…

Pero las/los/les niñatas/os/es neoliberales y las/los/les oportunistas de todo pelaje y condición no me dan pena. Me dan asco.

 

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