La justificación del Ministerio de Irene Montero para poner en marcha el ‘Servicio 028 Arcoíris’ contra la LGTBIfobia son los datos proporcionados por la encuesta ‘FRA’ (For Fundamental Rights) de la Agencia Europea de Derechos Fundamentales y del informe del Ministerio del Interior para 2021 sobre delitos de odio. De los primeros, la propia encuesta advierte de que “no cumple con los criterios estadísticos de representatividad” mientras que los datos del Ministerio mezcla y no desagrega los datos por orientación sexual (homofobia) e identidad de género de la víctima (transfobia).
Vamos por partes. El Ministerio del Interior, en su ‘Informe sobre la Evolución de los Delitos de Odio 2021’, aporta los datos de delitos “por orientación sexual e identidad de género” juntos, en la misma categoría que, según informa, suponen “la segunda causa del total de delitos de odio, constituyendo el 26’5% de todos los que fueron denunciados en nuestro país en 2021, siendo esta la segunda causa de delitos registrados, con 466, lo que representa un ascenso de 67,63% con respecto a las cifras del año 2019 y un aumento del 68,23% desde el año 2020”, literalmente lo que explica el documento justificativo de Igualdad y de la Secretaría de Estado en su informe de ‘Necesidad e Idoneidad’ para el ‘028’. Pues bien, no sabemos cuántos de estos delitos corresponden a homofobia y cuántos a transfobia, porque nada tiene que ver una cosa con la otra, pero Igualdad asegura que “Las discriminaciones que sufren las personas LGTBI (las sufren) más específicamente las personas Trans”. En conclusión, no hay datos que confirmen esta aseveración. Hasta ahora no se había puesto en marcha el servicio específico para la homofobia pero se justifica con unos delitos de los que no hay datos: la Transfobia.
no sabemos cuántos de estos delitos corresponden a homofobia y cuántos a transfobia, porque nada tiene que ver una cosa con la otra, pero Igualdad asegura que “Las discriminaciones que sufren las personas LGTBI (las sufren) más específicamente las personas Trans”.
Veamos ahora cuántas personas Trans sufren, según los datos oficiales de Europa, discriminación como para ser el segundo motivo por el que se pone en marcha el servicio, recuerdo, con 3 millones 200 mil euros.
La encuesta de la Agencia Europea de Derechos Fundamentales de la European Union for Fundamental Rights (a partir de ahora la FRA), en su encuesta de 2019 (sólo se han hecho dos: 2012 y 2019) para personas LGTBI, arroja que “el 63% de las personas Trans encuestadas en España manifiestan haberse sentido discriminadas en los últimos 12 meses” en 8 parámetros diferentes. Encuesta para los 27 de la UE más Reino Unido, Macedonia del Norte y Serbia. Este es el segundo dato justificativo para el “Informe de Necesidad e Idoneidad” del ‘Servicio 028’. La encuesta se realizó a personas que “se identificaron a sí mismas como lesbianas, gays, bisexuales, trans o intersexuales” en sondeo en línea (online) y abierto (respuesta libre).
¿Esto qué quiere decir? Que la encuesta fue publicitada por diferentes canales en cada país, principalmente asociaciones LGTBI; que no hay un censo poblacional de encuestados que garantice que reúnen las condiciones de la población que se quiere investigar; que cualquiera ha podido responder (respuesta real, falsa o inducida). ¿Es representativa y fiable, entonces, una encuesta abierta y en línea? Por supuesto que no, lo reconoce la propia FRA: “Una encuesta en línea opcional no ofrece, en principio, una muestra de probabilidad aleatoria que cumpla con los criterios estadísticos de representatividad”.
Hasta ahora no se había puesto en marcha el servicio específico para la homofobia pero se justifica con unos delitos de los que no hay datos: la Transfobia.
Para verificar las respuestas, la UE utilizó dos métodos: la velocidad de respuesta, tiempo adquirido para completarla y si hubo contradicciones/inconsistencias en las respuestas. Estos verificadores pueden ser válidos en una encuentas con mayor fiabilidad, pero en este caso no son suficientes para confiar en respuestas válidas. No sólo por la posible falsedad en una respuesta hecha desde el anonimato (no se requirió ningún dato personal al encuestado), sino porque los encuestados pueden estar en el inicio del proceso de transición, en dudas, no entender las preguntas, hacer la encuestas en varios periodos de tiempo… Los verificadores utilizados se contradicen con la propia metodología solicitada a los encuestados cuando dicen que “La encuesta permitió a los encuestados completar la encuesta cuando y donde les resultara más conveniente, a su propio ritmo y en su idioma nacional”.
¿Por qué la encuesta no tiene el nivel el nivel de representatividad requerido? Se hicieron un total de 140.000 encuestas, se desecharon, por los métodos arriba explicados (tiempo e inconsistencia de respuesta) 1.822 (un 1,3% de error). Esto procura a la encuesta una fiabilidad del 98’7%. Esto es imposible, repito, en la ciencia sociológica es imposible este nivel de fiabilidad con una muestra de 139.800 una vez restadas las 1.822 para 30 países. Como mínimo tenían que haber aplicado un 95% de fiabilidad, haber excluido como mínimo el 5% de las encuestas. En España contestaron 20.180 personas LGTBI, de las que se identificaron como Trans 2.067.
en la ciencia sociológica es imposible este nivel de fiabilidad
Más motivos por los que la encuesta no es fiable: es aleatoria; se dirigió a personas desde los 15 años pero la representatividad por sexo, edad, nivel socio-económico, cultural, geográfico… simplemente no existe. El censo de personas con todos sus datos permite que sea representativa de toda la población. Además, ¿Qué variable era para la FRA la ‘T’?: “Personas trans – aquellas cuya identidad de género o expresión de género no se corresponde completamente con el sexo que se les asignó al nacer”. Que se les asignó al nacer…buscando aún al sexador de los hospitales. Fuera bromas, no es científico ¡viniendo de la UE!
En definitiva, las políticas públicas para personas Trans del Gobierno de España se han basado mayoritariamente en que “el 63% de las personas Trans han sufrido agresiones a lo largo de su vida”. De 2.086 personas encuestadas en España para este sondeo se identificaron como Trans, el 63% son 1.314 personas muestrales. Nada de esto tiene que ver con la transexualidad, no contemplada en ningún momento. Una Ley orgánica; un servicio de atención permanente 028 Arcoíris por 3 millones 200 mil euros; un Pacto de Estado contra la Transfobia, desvío de fondos públicos de la Violencia de Género para promover las políticas Trans, la prensa mayoritaria remando a favor, acusaciones de odio al resto de la población… todo porque 1.314 personas que se dijeron Trans sin verificar dijeron que han sufrido algún tipo de agresión. Que el delito de odio es una cuestión de Derecho Humano ya recogido en la Constitución nadie lo discute; que todos tenemos Derecho a las mismas oportunidades nadie lo duda. Pero que este Gobierno haya vulnerado los Derechos de la mitad de la población, que borra la palabra MUJER desde las instituciones; que nos han arrebatado nuestros espacios seguros; que nos han quitado nuestros logros; que se han burlado de 300 años de feminismo por estos datos me hace pensar que hemos padecido una alianza parlamentaria misógina y espuria.
se han burlado de 300 años de feminismo
De la adjudicación de 4 millones de euros contra la ‘Discriminación Racial y Étnica’ a la Fundación Secretariado Gitano hace justo un año y de sus resultados ignotos hablamos otro día.